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La Unión Estadounidense de por las Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) presentó una demanda colectiva contra la administración de Trump, afirmando que denegó a niños migrantes sus procedimientos jurídicos justos por detenerles por varios días en habitaciones de hoteles y luego les deportaron. Así fue el caso de un joven guatemalteco de 16 años, afirma la ACLU.
En esta demanda colectiva, la ACLU representa un joven guatemalteco de 16 años que huyó a los Estados Unidos por sí mismo para escapar lo que la demanda llama “la persecución grave” en Guatemala. Su padre, Mario Escobar Francisco, está demandando de su parte. Supuestamente, el joven fue aprehendido por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los EE. UU., y luego fue detenido en una habitación de un hotel. Supuestamente, él todavía está detenido en Texas.
Para proveer el contexto de la elección del joven de salir de Guatemala y venir a los Estados Unidos, la demanda colectiva de la ACLU explica que en países incluyendo El Salvador, Honduras, Guatemala y México, pandillas controlan “franjas grandes,” del país y regularmente van dirigido a niños, representando un peligro a su seguridad.
Esto supuestamente llevó a muchos niños de estos países a huir de sus casas para tratar de venir a los Estados Unidos con la esperanza de encontrar seguridad. Sin embargo, la ACLU afirma que frecuentemente se enfrentan con políticas inhumanas de inmigración, y frecuentemente son deportados a sus países, así poniendo su seguridad en riesgo grave.
Según la demanda colectiva, el joven debería haber sido enviado a un centro para niños para recibir cuidado y alojamiento hasta que pudiera reunirse con su padre, que estaba en los Estados Unidos, o hasta que pudiera reunirse con un “padrino apropiado.” Supuestamente, él tenía derecho a una variedad de protecciones procesales incluyendo una “audiencia, y apelación, completa para determinar su derecho a quedarse en los Estados Unidos con su padre.” Sin embargo, la ACLU sostiene que le denegó estos derechos, y fue sometido a una detención injusta a través de un proceso de la administración de Trump.
La ACLU explica que el joven fue detenido en la habitación de hotel como parte del proceso de Título 42, un proceso de inmigración puesto en práctica por la administración de Trump a la luz del brote del coronavirus. Según la ACLU, la manera en la cual la administración de Trump utiliza el proceso de Título 42 contraviene las protecciones establecidas para niños, y les deniega sus derechos procesales.
La ACLU explica que el proceso es injustificado, y realmente es una parte de los planes antiinmigrantes de la administración de Trump, y que utiliza la apariencia del brote del coronavirus como una justificación para los defectos de la política.
La demanda colectiva explica que Título 42 intenta conceder poderes ciertos de la cuarentena y pruebas. Sin embargo, la administración supuestamente está utilizando los poderes en una manera que no es deseada, utilizándoles para denegar a niños migrantes sus derechos bajo la ley de inmigración.
La ACLU explica que la ley federal ya abordó cómo funcionarios de la frontera deben responder si sospechan que un inmigrante o persona migrante tiene una enfermedad contagiosa.
Sin embargo, incluso si esto se sospecha, estos procesos todavía requieren que el individuo reciba sus derechos. La ACLU enfatiza que “niños no acompañados de ninguna manera deben ser deportados sin una oportunidad adecuada para determinar su derecho a permanecer en los Estados Unidos.”
La ACLU explica que, bajo el disfraz de proteger a funcionarios de inmigración del coronavirus, la administración de Trump ha empezado a detener menores durante varios días mientras los funcionarios de la frontera organizan su deportación.
Sin embargo, la ACLU sostiene que esto no es necesario, porque ya hay medidas de seguridad que pueden proteger a funcionarios de la frontera, incluso al uso de mascarillas y guantes, y la implementación del distanciamiento social. La ACLU dice que muchos funcionarios de salud pública han expresado que estas medidas son seguras y ayudan a prevenir la propagación del coronavirus.
¿Su comunidad tomó medidas para proteger a individuos vulnerables durante la pandemia? Avísenos en la sección de comentarios.
El detenido es representado por Stephen B. King, Cody Wofsy, Morgan Russell, Adreinne Harrold, Andre Segura, Kathryn Huddleston, Rochelle Garza, Brantley S. Drake, Celso J. Perez, Lee Gelernt, Daniel A. Galindo, Scott Michelman y Arthur B. Spitzer de la ACLU; por Robert Silverman de Oxfam America; y por Karla M. Vargas y Efren C. Olivares de Texas Civil Rights Project.
La Demanda Colectiva sobre Niños Migrantes y la ACLU es PJES, et al. v. Wolf, et al., Case No. 1:20-cv-02245, en el Tribunal de Distrito de los EE. UU. para el Distrito de Columbia.
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